domingo, 10 de marzo de 2013

¿De qué Familia hablamos hoy?


En los tiempos que corren pareciera que la familia como institución está siendo fuertemente cuestionada. Algo de su eficacia como sostén de la subjetividad ha fallado, el modelo de familia heterosexual, monogámica y sacramental no estaría dando cuenta de ninguna seguridad para sus integrantes.
La caída de ciertos paradigmas ha provocado revisar y re-visitar modelos y a pesar de las resistencias que provoca , interpelar la constitución de la familia como modelo patriarcal. Sería muy interesante en el marco de este encuentro detenernos a pensar que cambia y que permanece.
La familia Patriarcal como institución que se incorpora desde la cultura y para sostenerla, proveyó instituidos que crearon certezas tranquilizadoras para las necesidades pulsionales del sujeto de las sociedades modernas, sin embargo, hoy varias de estas certezas cayeron.
Vayamos a la clínica: Juan es un paciente que en sesión llora desconsoladamente ante la noticia que su mujer decidió separarse luego de varios años de una vida en común muy poco satisfactoria. Juan está enamorado de otra mujer hace tiempo, su matrimonio para él estaba terminado, sin embargo muy angustiado me dice: “hay que sostener la familia “. De qué familia está hablando? Ante mi pregunta surge una respuesta que tiene que ver con un modelo jamás vivido por Juan. En su familia de origen sus padres eran divorciados, desde muy pequeño vivió con su mama. Sin embargo desea una familia unida, continente, etc
Claudia me cuenta muy feliz que “finalmente voy a volver a estar en familia”. Claudia luego de casarse por segunda vez comienza una convivencia con Pedro y los hijos de ambos .Le pregunto porque cree que le produce tanta felicidad “volver a estar en familia” (Claudia se divorció de su primer marido, un hombre golpeador antes que naciera su hijo, también proviene de una familia de origen que se desintegro por causa de escenas violentas cuando ella era pequeña) Me responde: “Y…viste…la familia es la familia…te da seguridad, paz….no se….la añoraba”
Jose, llega al consultorio y cuenta que está feliz, viene de anotarse en el registro civil para casarse con su pareja homosexual luego de quince años de convivencia , espera este matrimonio para anotarse y formar parte de una lista de padres adoptantes, “ finalmente voy a poder tener mi propia familia” me dice.
No puedo dejar de cuestionarme que se añora, que angustia, que produce felicidad en relación al logro o la perdida de lo instituido en términos de familia.
Castoriadis planteo que las instituciones son una red simbólica en la que se combinan dos variables: un componente funcional y otro imaginario. En otras palabras hablaría de configuración y estructura, algo es instituido y algo fundante para la subjetividad.
Lo instituido del modelo familiar, al modelo socio –cultural reinante está siendo interpelado por el cambio de paradigmas. Los poderes se juegan en otras direcciones. 
Las nuevas configuraciones familiares que en realidad no son tan nuevas sino que han comenzado finalmente a ser visibilizadas luego de permanecer años ocultas. Esta es una cultura que hasta ahora ha rechazado estas modalidades, dejándolas en una categoría de
marginalidad, pero hoy, les otorga un marco de legalidad incluyéndolas. Lo hace generando leyes que pueden pensarlas: familias ensambladas, familias homoparentales, familias monoparentales.
La necesariedad de su inclusión tuvo que ver con una realidad que se imponía más allá de las voces críticas que se levantaron en su contra desde los profetas arcaicos del paradigma que sostiene el matrimonio sacramental, monogamico, heterosexual y patriarcal.
Los cambios son resistidos hasta que se imponen, asistimos hoy a la caída de la sacra familia. De eso no hay dudas. La ley de divorcio. La ley de matrimonio civil igualitario, la ley de adopción y la ley de patria potestad compartida nos imponen cambios a las configuraciones familiares, las formas han cambiado, pero lo imaginario persiste, insiste y desde allí conforma estructura.
Hoy se habla de coparentalidad, las parejas se separan y se vuelven a formar cohabitando con hijos de ambos, las figuras adultas a cargo de una familia pueden ser dos hombres o dos mujeres pero la familia como base sobrevive y se anhela. ¿Porque si el orden familiar ha sido provocador de tanta infelicidad, se desea?
Pichon Rivière nos dirá que la familia es "una estructura social básica que se configura por el interjuego de roles diferenciados, el cual constituye el modelo natural de interacción grupal". 
Desde este punto de vista la familia es el primer grupo social con el que cuenta el individuo, está inmerso en èl desde su nacimiento, y aun antes, es pensado en y con una familia, constituyéndose en el elemento básico para su desarrollo.
Pero si estamos de acuerdo que como instituido ha sufrido un quiebre, que las configuraciones familiares está modificándose y son distintas que antaño ¿Que sería la familia que como estructura, persiste?
¿Podríamos pensar que el pasaje del sujeto de natura a cultura produjo en el psiquismo además de las protofantasias de: escena primaria, de seducción y de castración, una protofantasia de anhelo de familia?
Protofantasia en tanto esquema inconsciente que trasciende la vivencia individual y se transmite filogenéticamente, estructuras irreductibles a las contingencias de la vivencia individual, con carácter arcaico pero al mismo tiempo como fundante del sujeto.
En las viñetas que trascribí, las familias deseadas no son las familias vividas, sin embargo observamos en la intención de insistir con la idea de “formar una familia”, el fuerte deseo que queda reservado a la fantasía como actividad psíquica que permite seguir gozando de esta libertad que el principio de realidad ha obligado a ceder.
Claude Lévis Strauss señalaba: “la vida familiar está presente prácticamente en todas las sociedades humanas. Incluso en aquellas cuyas costumbres sexuales y educativas están distantes de las nuestras. Tras haber afirmado durante alrededor de cincuenta años que la familia, tal como la conocen las sociedades modernas no podían ser sino un desarrollo reciente, resultado de una prolongada y lenta evolución, los antropólogos se inclinan ahora a la opinión contraria; a saber, que la familia apoyada en la unión, más o menos duradera y socialmente aprobada de un hombre, de una mujer y sus hijos es un fenómenos universal, presente en todas los tipos de sociedades”
Si esta protofantasia ejerce una acción como constituyente del psiquismo y pensándolo desde la Teoría del Apego que considera la tendencia a establecer lazos emocionales íntimos con individuos determinados, como un componente básico de la naturaleza humana, entendiendo lo humano desde su origen vulnerable.
Serán las pulsiones de apego y aferramiento las que otorguen la necesidad del otro como indispensable para la sobrevivencia.
Al infans lo pensó y lo recibirá una red inter e intrapersonal que serán sus figuras de apego, quienes brindaran un continente para su evolución .
La necesidad de esta base segura de lanzamiento a la vida es imprescindible para el niño. La cultura le ha dado en llamar el contexto familiar, la familia. Podemos pensarlo desde Bowlby como las figuras de apego que exceden los marcos ideológicos y políticos y que no dependen quienes encarnen estos roles, fuera de toda biología y más allá de la reproducción.
La Teoría del Apego planteara que es importante y fundamental para la evolución saludable y segura de un sujeto, que existan estas figuras, pero no determinara que en su constitución debe haber un padre o una madre sino figuras asimétricas disponibles para asumir el sostén, contención y responsabilidad de la cría.
Por lo tanto vamos generando el contorno sobre el cual se va constituyendo la idea de familia como estructura. Un punto fundamental es la asimetría, dadora de un lugar de contención de quienes ejerzan la función maternante y paternante hacia los hijos que por diferencias madurativas dependerán de estas figuras adultas.
Por lo tanto la familia como estructura tomara los ropajes que las configuraciones familiares de la época determinen, pero que sobrevivirá a los avatares ideológicos de los tiempos, por imponerse como una necesidad básica humana.
Sera entonces en un contexto donde figuras asimétricas capacitadas para dar a otras en estado de dependencia y vulnerabilidad, sostén con todo lo que esto implica dentro de la teoría del Apego ( bonding, handling, y holding) y que a su vez estén capacitados para aportar el corte necesario que permita a la cría humana pasar del estadio de dependencia absoluta , pasando por la dependencia relativa al de independencia.
¿Sera entonces que más allá de los cambios políticos e históricos y de las economías de mercado, lo que persiste es esta imperiosa necesidad de formar parte de un grupo humano que otorgue a la cría humana sentido, lugar de pertenencia y que le permita construir una identidad?
¿Sera desde aquí, el lugar donde siga pujando por el anhelo de familia, más allá de las dolorosas vivencias individuales?